No lo des más vueltas, porque al final acaba siendo peor. Si se te mueve un diente, por poco que sea, tienes que ir al dentista. No pienses que eso puede ir a mejor, al revés. Irá a peor. Por eso, lo que tienes que hacer es no dudar en llamar al dentista y ponerte en sus manos. Tarde o temprano, acabarás por hacerlo.
Y es que los dientes son unas piezas muy frágiles, y en el momento que tenemos un problema hay que coger el toro por los cuernos. Yo siempre cuento mi caso personal. Hasta los 18 años no fui al dentista. Así como suena. Mis padres eran un poco despegados y yo, la verdad, es que tampoco le ponía mucho entusiasmo. Siempre pensé que los tenía bien.
Pues bien, a los 18 años, ya con novia, decidí hacerme una limpieza de dientes para quitarme el sarro, ese maldito sarro que nunca sabemos de dónde procede. Ya se sabe que eso produce halitosis y no quería que mi pareja saliera corriendo a los pocos días de estar saliendo. Así que decidí hacerme una limpieza. Pues bien, el resultado no pudo ser peor. La limpieza descubrió que mis dientes estaban unidos por sarro, claro que no se me movía ninguno, pero en el momento que quitaron el sarro, ese fue un desastre.
Tan fácil como que el sarro se había comido todo el hueso y estaba en peligro el mantenimiento de varias de mis piezas dentales. Por suerte los especialistas de Clínica ZM me pudieron hacer un tratamiento de prótesis dentales y el lamento no fue tan grave. Ahora bien, si no hubiera sido por ellos, ahora mismo estaba sin dientes.
En qué consisten
Los implantes dentales son unos tornillos de titanio que se instalan en el hueso y que son capaces de soportar la fuerza masticatoria. Además te sirven para devolver la estética y función dentaria porque una vez que estos están osteointegrados (unidos totalmente al hueso), se coloca sobre ellos una funda, restableciendo la anatomía idéntica a la natural. Y esto es lo que me hicieron a mí.
Por suerte ahora mismo los avances son grandes y mediante esta técnica es posible reponer cualquier diente en forma fija y definitiva sin necesidad de tocar o apoyarnos en dientes vecinos. Con una visita al dentista puedes saber en qué consiste el tratamiento de Implantología Oral y qué procedimiento se debe seguir en su colocación. Así puedes ir sobre seguro.
Es cierto que como te digo, en los últimos años los tratamientos han avanzado mucho. Antes es cierto que con este tipo de tratamiento de implantes dentales muchas personas utilizan prótesis removibles que se utilizaban antiguamente con los inconvenientes propios. Por ejemplo, había una falta de sensibilidad, movilidad, problemas para masticar, llagas en la boca, la pérdida de hueso progresivo donde se apoya, que era lo que me ocurría a mí, e incluso la pérdida del gusto. Algo que en mi caso, por suerte, no llegué a tener.
Sin embargo, como nos comentan desde la clínica MZ, estas prótesis pueden ser reemplazadas por prótesis fijas apoyadas en un número determinado de implantes dentales. Esto varían según el caso y que sólo podrían ser quitadas por un dentista o por una sobredentadura que aunque pueda ser desmontada por el paciente, asegura una gran estabilidad y confort cuando está colocada. La verdad es que en mi caso fue como poder volver a sentir lo que es masticar.
El procedimiento quirúrgico es muy sencillo. En mi caso recuerdo que se realizó en las clínicas dentales que tienen en Toledo, bajo anestesia local. La intervención duró aproximadamente 1 hora, porque era un diente y el post operatorio lo realice en casa y sin ningún problema. Los profesionales me dieron una serie de recomendaciones y todo estuvo controlado y volví a ser el mismo.
Y sí, puedo decir que este tratamiento cambió mi vida. Por suerte llegó a tiempo y me sirvió para que la que entonces era mi novia no saliera corriendo. Eso sí, se dio cuenta de la dejadez que había tenido en los años anteriores.
Ahora seguimos juntos, aunque mi cuidado de la boca es diario, no quiero volver a tener esos problemas que la verdad es que luego a largo plazo son muy complejos. Porque hay que reconoce que una persona con la boca mal, tiene más problemas a la hora de todo. Por ejemplo de encontrar trabajo, de entablar una posible relación con otra persona o simplemente para tener un poco de ocio.