La moda nupcial suele tender al clasicismo y lo tradicional, o al menos eso es lo que pasaba hasta ahora, porque a pesar de que en años anteriores hemos asistido a la creación de vestidos y trajes modernos, diferentes y originales, no ha sido hasta este año, 2019, cuando verdaderamente hemos empezado a vivir una especie de cambio radical en lo que a apuestas atrevidas de diseñadores se refiere.
Si bien es verdad que siempre ha habido algo llamativo en toda colección, los propios diseñadores siempre han sido conscientes de que esa pieza era creada por y para la pasarela, del mismo modo en el que saben que hay ciertas prendas que muestran en la pasarela de la temporada otoño-invierno o primavera-verano que jamás se verán en las tiendas porque, realmente, no se crean para que la mujer del día a día las luzca, sino que se crean por y para la pasarela.
Pues bien, este año la tendencia en cuanto a moda nupcial muestra una vuelta de tuerca, algo que muchos amantes de la moda llevamos esperando desde hace años, una actualización que todo catálogo venía pidiendo a gritos.
Diseñadores que arriesgan
La diseñadora y profesional de la venta de moda nupcial Joana Diestre ya lleva años avisando de este cambio tan necesario y, de hecho, en sus colecciones ya veíamos muestras de esta tendencia, año tras año, por lo que puede considerarse toda una pionera.
¿Pero en qué arriesgan exactamente estos novedosos diseños? Pues parece que hay 10 tendencias en vestidos de novia para este 2019 que son la base de la actualización de la moda nupcial.
- Capas escalonadas: que no es lo mismo que volantes. Estos pueden ser escalonados, sí, pero no necesariamente, y tampoco todas las capas escalonadas tienen que ser volantes. Quiero dejar esto claro porque cuando vemos imágenes que ejemplifican esta tendencia, la sociedad lo que ve son volantes tradicionales colocados de forma sutil sobre vestidos de gasa y no, no tiene nada que ver con eso.
- Más pantalones: ¿quién dijo que la novia tenía que vestir vestido sí o sí? Las novias con pantalones pueden estar igual de hermosas y hay algunas chicas que se sienten mucho más “ellas mismas” con pantalones que con faldas.
- Lazos: no sé qué siniestra mente ha decidido empezar a poner enormes lazos en sus creaciones y luego el resto de diseñadores lo han copiado, pero el caso es que este año van a ser tendencia, por mucho que a mí me fastidie su presencia en cualquier tipo de prenda.
- Mangas burbuja: que no son lo mismo que las mangas de farol, que quede claro.
- Capas: Adiós al velo. Si alguien quiere llevar algo de tela por la espalda con mucha caída a modo de cola tiene que optar por las capas. Quedan perfectas cuando van unidas a la manga.
- Cenicienta: aquellas mujeres que buscan un traje de princesa seguirán teniendo cabida pues los vestidos con mucho volumen seguirán existiendo.
- Bienvenido el vestido midi: vestidos rectos hasta la rodilla, con adornos preciosos y de todo tipo.
- Perlas: No, a mí no me gustan, pero por lo visto es otra de las tendencias para este 2019 y no hablo solo del típico collar o la pulsera, sino de perlas bordadas al vestido buscando un toque romántico barroco.
- Estampados y cortes geométricos: me encanta esta idea, es moderna y no desentona para nada con casi ningún tipo de corte de vestido nupcial.
- Metálicos y lentejuelas: esto, por supuesto, es solo para las más atrevidas y aquellas que quieran llamar la atención más de lo que ya se suele llamar el día de tu boda. Yo odio los brillos, pero a aquellas a las que les gusten, están de suerte.
De este modo, algunos diseñadores como Inbal Dror, Galia Lahav, Anne Barge o Rome Arodaky han dejado que esas tendencias se vean en sus pasarelas de moda nupcial. Quizás la más tradicional haya sido Carolina Herrera, pero es que sus diseños son ya de por sí tan mágicos que tal vez ella sea una de las pocas a las que les conviene no innovar demasiado. Os dejo aquí el enlace a la moda nupcial de Vogue.