Que España es un país donde no destaca demasiado el bilingüismo (fuera de las lenguas cooficiales en algunas autonomías) lo sabemos, así como también sabemos que nuestros escolares suelen obtener las calificaciones más bajas en inglés y francés de toda Europa, pero lo que no sabíamos es que miles de estudiantes, conocedores de la importancia de saber idiomas, luchan cada año contra los recortes del Estado en las Escuelas Oficiales de Idiomas, el único plus que tienen muchos de ellos para mejorar el nivel de inglés con el que salen de la ESO y el bachillerato.
15.000 son las firmas que han conseguido los profesores y estudiantes de las Escuelas Oficiales de Idiomas de Madrid, buscando que la Conserjería de Educación elimine el número mínimo de alumnos para formar grupo y ofrecer clases en ese idioma.
Y es que Inglés puede que se llene fácilmente en todas las EOI españolas, pero otros idiomas no consiguen ni 15 alumnos por aula ¿significa eso que, tras conseguir su plaza, deben esos alumnos renunciar a su educación en idiomas solo porque esa lengua no sea tan demandada?
Del mismo, modo, alumnos y profesores de todo el país piden mejorar la formación en idiomas de colegios e institutos pues, como es sabido, estamos a la cola de Europa.
Según datos de 2018, casi la mitad de los españoles (el 46%), desconoce una lengua distinta al español. Estamos por encima de la media europea, es verdad, ya que solo el 35,4% de los ciudadanos del continente asegura no hablar ni una sola lengua extranjera, pero eso es solo en la media europea ya que si hablamos de países España está muy por debajo.
Por detrás de nuestro país solo se sitúan Bulgaria, Hungría, Rumanía y Reino Unido. Por lo visto los británicos, con eso de que su lengua materna es el inglés, el idioma de los negocios, se contentan y dejan pasar la oportunidad de hablar español, alemán, francés o cualquier otro segundo idioma.
Los europeos que más lenguas hablan son los que viven en Suecia, Letonia y Dinamarca, seguidos de cerca por los ciudadanos de Lituania, Luxemburgo, Finlandia, Malta y Estonia.
La situación en España
Por zonas geográficas, la diferencia en nuestro país es muy grande. Mientras que comunidades autónomas como el País Vasco y Madrid tienen el mayor porcentaje de bilingües de España, comunidades como la andaluza o la extremeña se quedan en números rojos, casi granates.
Pero todos sabemos que los idiomas, en el sistema educativo, son muy importantes. Ellos nos abren puertas en la cultura, en la vida profesional y en la sociedad. Por eso hemos de seguir apostando por ellos, e ir mejorando un poco cada año.
Por ahora, y visto lo visto, la mayoría de empresas han de recurrir a agencias de traducción especializadas. En Eikatrad aseguran que una de cada tres empresas necesitan, al menos una vez, los servicios de este tipo de agencias.
Según estos datos, si los españoles estuviéramos mejor formados en idiomas, la posibilidad de acceder a un puesto de trabajo mejor se dispararían notablemente. Aunque todo tiene una doble visión, ya que si todos tuviéramos formación en idiomas con la misma fluidez, acabaríamos por equipararnos de nuevo y dependeríamos de otros factores para conseguir acceder a los puestos de trabajo de mayor responsabilidad.
Pero ¿cuáles son las lenguas del futuro? ¿Qué idioma es mejor estudiar de cara al mañana? Pues los expertos aconsejan estudiar más de una lengua extranjera con la finalidad de fomentar la movilidad educativa, cultural, científica y comercial. Así, deberíamos elegir dos de las lenguas más habladas del mundo que son, y en este orden: chino, español, inglés, hindi y árabe. ¿Dónde quedan entonces el francés o el alemán? Pues en las posiciones 16 y 17 de la lista de lenguas más habladas, muy por debajo de las anteriormente citadas.
Ahora bien, no solo hemos de basarnos en las lenguas más habladas para seleccionar qué idioma debemos estudiar, sino que hay lenguas muy poderosas que no se encuentran entre esas 5 del ranking. Según el Power Language Index, las lenguas más poderosas del mundo son, y por este orden: inglés, mandarín, francés, español y árabe, seguidos de cerca por el ruso, el alemán y el japonés.
Si tenemos en cuenta que la mayoría de niños estudiarán inglés en la escuela, tal vez sea interesante, si los padres pueden permitírselo, que el pequeño vaya a clases privadas de chino, francés o árabe. O, en su defecto, esperar a cumplir los 16 años y acceder a los grupos de las Escuelas Oficiales de Idiomas, pero eso será (si no cambian de idea) si esos idiomas tienen el número suficiente de estudiantes.