El consumo de queso ha aumentado, porque según el Informe de Consumo de Alimentación en España elaborado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación de 2019, el consumo de queso continuó creciendo, experimentando así una variación favorable de 1,6% respecto a 2018.
El queso de oveja es un alimento que forma parte de la gastronomía española, lo puedes comer a diario o varias veces por semana. Elaborado a partir de la maduración de la cuajada de la leche.
Es un queso que conquista por su intensidad, aroma y sabor. Además, es uno de los quesos con más proteínas, también tiene un alto valor nutricional y es rico en minerales que ayudan a prevenir la osteoporosis y la descalcificación.
Con la leche de oveja se preparan quesos muy conocidos como es el queso
curado manchego, queso fresco, requesón, etc.
Su composición nutricional depende del agua que se utiliza en su elaboración, ya que cuanto menos cantidad de agua, mayor concentración de nutrientes.
«El queso de oveja es una fuente de proteínas, indispensables para el correcto funcionamiento del organismo, así como para el desarrollo de los músculos», informa el diario La Vanguardia.
También es un alimento rico en calcio, necesario para el fortalecimiento del sistema óseo, y cuenta con bastante fósforo, que ayuda a la formación de huesos y dientes. También tiene minerales como el magnesio o el zinc.
Este producto también mejora el funcionamiento del sistema inmunológico y nervioso, y tiene propiedades anticancerígenas, gracias a los ácidos grasos (omega 3 y ácido linoléico).
¿Qué aporta la leche de oveja?
La leche de oveja es idónea para personas que tienen problemas digestivos con la leche, porque es menos pesada que la de vaca. Las personas que sufren estas patologías deben apostar por los lácteos de oveja:
-Inflamación crónica.
-Poca tolerancia a la leche de vaca.
-Intestino permeable.
-Enfermedades autoinmunes.
-Patologías dónde la barrera intestinal se encuentra debilitada.
-Síntomas gastrointestinales en ausencia de intolerancia a la lactosa.
El queso de oveja tiene la leche con más calcio. Un dato muy interesante es que en esta leche encontramos un 80% más de calcio que en la de vaca. Un vaso de leche de oveja aporta al organismo hierro, yodo, fósforo, magnesio, calcio y sodio. Además de vitaminas B9, B7, B3, A, C, D, E y K.
Es aconsejable que los niños, mujeres embarazadas y adolescentes tomen alimentos ricos en calcio, porque es un mineral esencial para los huesos, dientes y para la etapa de crecimiento.
Según la Organización Interprofesional Láctea (InLAC), el consumo de este tipo de productos también está asociado a un patrón de dieta equilibrada.
El queso de oveja gracias a sus niveles bajos de colesterol, es perfecto para evitar el desarrollo de posibles afecciones cardiovasculares.
Pastoreo en libertad
Es muy importante el cuidado y la alimentación de los animales que producen alimentos, ya que son
imprescindibles para garantizar un futuro sostenible.
Los profesionales de ADIANO explican que es fundamental la elaboración de quesos, pero con la convicción de preservar y cuidar el medio ambiente, la naturaleza y los animales, por eso en su web solo se puede comprar queso manchego online con DO que asegure su calidad y origen.
Es aconsejable que estén en libertad para que puedan pastar en el campo, jugar, descansar o tomar el sol. Es muy importante preocuparse por el bienestar, que vivan en buenas condiciones y que las ovejas obtengan los alimentos de los pastos de la finca.
Esto permite conseguir una leche de calidad y propiedades organolépticas excepcionales para fabricar quesos artesanos y sin aditivos ni conservantes.
Los tipos de quesos según la leche
Los diferentes tipos de quesos son:
Los quesos con leche de oveja: Son cremosos y aromático, el porcentaje de vitaminas es mayor.
Los quesos con leche de vaca: Se trata de un producto suave y con poca grasa.
Los quesos con leche de cabra: Su olor es fuerte y suelen ser blancos, este tipo de queso es perfecto para personas que siguen dietas bajas en potasio.
Los queso con leche de búfala: Es blanco y su sabor es levemente endulzado.
Distintas maneras de tomar el queso de oveja
El queso de oveja es muy versátil, porque se puede comer como aperitivo, plato principal o postre. Apuesta por él, para incluirlo en tu dieta mediterránea, tanto por sus propiedades como por su sabor tan característico con el toque ácido.
Una de las mejores tapas que puedes degustar es la de una porción de queso de oveja con una copa de vino. Para una cena especial puedes preparar un plato de este queso con frutas, frutos secos o membrillo.
O simplemente un chorrito de aceite de oliva virgen extra por encima del queso, ya que es el mejor maridaje que puedes utilizar.